Es habitual ver en las entradas a las vecindades de algunas alcaldías (distritos) de Ciudad de México (CDMX) carteles que anuncian cortes de agua durante lapsos más o menos prolongados de tiempo. A veces, ni siquiera se avisan con antelación. Los habitantes de la capital mexicana tienen que hacer frente a este tipo de coyunturas, que en ocasiones están focalizadas en una colonia –barrio– concreta, pero, en otras, se extienden a grandes espacios o municipios del área metropolitana. Algo que sucede a pesar de que en esta megalópolis llueve –de media– por encima de los 1.000 milímetros anuales, mientras que en Madrid la pluviometría se reduce a poco más de los 400.
Vía: El Confidencial